La Alcaldía de Medellín entregó permisos a 261 venteros tras regulación de su actividad en el espacio público
- Se tuvieron en cuenta aquellos que pertenecen a las Intervenciones Territoriales Estratégicas y llevaban más de una década a la espera de que se les concediera.
- Estas autorizaciones estaban congeladas desde 2012, lo que fomentó la informalidad desorganizada en la ciudad.
- Con las resoluciones se ofrece una opción de seguridad, además del cuidado del espacio público.
Con la entrega de 261 resoluciones a venteros y venteras, la Alcaldía de Medellín hace posible la creación de los corredores comerciales, organizados, regulados y convierte a la completa legalidad a quienes, por años, desarrollaron esta actividad económica de manera informal.
Las licencias para uso del espacio público estaban congeladas desde 2012 y, mediante resolución, esto fue ratificado en 2017. En esta administración, las autorizaciones se reactivaron para favorecer a quienes trabajan en la informalidad.
Para este año serán más de 9.000 las personas reguladas en los diferentes territorios desde 2020, incluidos los corregimientos y, además, para responder a las peticiones de la comunidad y de los comerciantes acerca del buen uso del espacio público.
“Con esto quitamos a toda esa gente que, a veces, llega a extorsionar, a cobrar el espacio. Ustedes ya tienen su permiso, su espacio, ahí ya nadie puede llegar a cobrarles, a decirles que es de ellos. No, es de ustedes. Eso implica compromisos, como todo. Quienes lo reciben también reciben el deber de cuidar el espacio, el manejo de los residuos sólidos y todo lo que se produzca. La inteligencia de qué tanto utilizo el espacio para que la gente pueda pasar es muy importante. Yo quiero ver filas comprándoles. Esto tiene una serie de responsabilidades y compromisos, pero tiene, más que cualquier otra cosa, amor y responsabilidad”, expresó el alcalde Daniel Quintero Calle.
De esta manera, pueden desarrollar su actividad de manera organizada y regulada, después de un proceso de más de dos años, en los que fueron seleccionados por su vulnerabilidad, su permanencia en las capacitaciones en formalización y emprendimiento y su disposición como aliados de la institucionalidad en el cuidado y fortalecimiento del espacio público.
Quienes reciben la resolución deben preservar el cuidado de la zona que habitan, el orden y la corresponsabilidad en cada territorio.