Ante esta situación, se ha adoptado un esquema de interrupciones programadas de acueducto en los sectores del occidente de Medellín. Estas interrupciones son necesarias para gestionar de manera eficiente el suministro de agua y garantizar un abastecimiento equitativo a toda la población, priorizando el consumo humano y las necesidades básicas.
Si bien las interrupciones programadas pueden generar incomodidades temporales para los habitantes de los sectores afectados, son medidas indispensables para asegurar un suministro continuo y sostenible de agua potable en medio de las condiciones climáticas adversas provocadas por El Niño.
Se hace un llamado a la comunidad a adoptar prácticas de uso responsable del agua, tales como reparar fugas, evitar el desperdicio y utilizar el recurso de manera eficiente. La colaboración de todos es fundamental para enfrentar los desafíos que presenta el cambio climático y garantizar un acceso equitativo al agua potable para las generaciones presentes y futuras.